Las ventas de motocicletas nuevas en Chile han experimentado un notable crecimiento desde 2020, alcanzando las 205.523 unidades. Dada esta alza, principalmente en zonas urbanas y entre nuevos conductores, la Asociación Nacional de Importadores de Motocicletas (ANIM) resalta la importancia de conocer a fondo la legislación vial para evitar multas y confiscaciones.
Según el registro de la Asociación Nacional de Importadores de Motocicletas, la venta de motos nuevas en Chile de enero a julio 2024 arrojó la comercialización de 14.322 unidades, en tanto durante julio se vendieron 1.979 motocicletas. En el desglose de estos 30 días, 1.725 unidades correspondieron a motos urbanas, mientras que 145 son las denominadas de competición y 109 cuadriciclos todo terreno (ATV+UTV). En cuanto al total de unidades comercializadas en términos geográficos, en el primer lugar se sitúa la Región Metropolitana con un total de 1.281 unidades vendidas, seguido por Coquimbo con 120. En tanto Valparaíso se posiciona en el tercer lugar con 119 y Biobío en la cuarta posición con 109.
El estudio presentado por el gremio arroja el indiscutible liderazgo de las motocicletas urbanas, fenómeno que se produciría debido a una importante migración de usuarios que tras usar el transporte público o definitivamente los automóviles, deciden optar por estas unidades urbanas debido a sus enormes beneficios “por las características de este tipo de unidades es bastante probable que se trate de nuevos usuarios, que ven en la moto una alternativa más económica de comprar y mantener, con menor impacto medio ambiental debido al bajo consumo de combustible y emisiones CO2 y un excelente aliado para sortear de mejor manera las congestiones en las ciudades. Sin embargo, hemos podido apreciar que muchos de estos nuevos usuarios no tienen conocimiento de las reglamentaciones o las multas a las que se ven expuestos, por lo que se hace indispensable educar sobre esto” menciona desde ANIM.
Según ANIM, en Chile, las multas que pueden aplicarse a los conductores de motocicletas son similares a las de otros vehículos, pero también incluyen infracciones específicas relacionadas con las características y normativas para este tipo de vehículo. Ante esta realidad la ANIM comparte una serie de normas para estar atentos.
Entre las faltas gravísimas se cuentan: exceder entre 20 y 60 Km los límites máximos de velocidad establecidos, conducir una motocicleta sin haber obtenido la licencia clase C, conducir una motocicleta con la placa patente oculta, no respetar la señal “Pare”, no detenerse ante la luz roja del semáforo. En cada uno de estos casos el conductor se expone a multas en UTM, el retiro de la unidad para ser llevada a un corral municipal, la suspensión de la licencia desde los 5 a 45 días y en caso de acumulación de faltas gravísimas, el conductor se expone a cancelación de su licencia.
Si hablamos de infracciones graves, la legislación es clara “si la persona conduce con licencia distinta a la clase C, entrega la moto a una persona que no cumpla con la licencia exigida, conduce un modelo con luces apagadas en las circunstancias que exige la ley y sus reglamentos, circula sin su documentación vigente, esto es, certificado de revisión técnica o certificado de homologación, permiso de circulación o seguro obligatorio de accidentes , la sanción puede ser de multas entre 1 y 1,5 UTM” menciona Cristián Reitze, director ejecutivo de la ANIM.
Adicional desde la ANIM agregan que también se considera falta grave “si la persona sobrepasa o adelanta cuando se aproxime a la cima de una cuesta o gradiente o a una curva o adelanta en un paso para peatones o en un cruce no regulado, o sobrepasa por la berma, adelanta en un puente, viaducto, túnel, cruce de ferrocarril o al aproximarse a cualquiera de estos lugares desde una distancia mínima de 200 metros”” menciona Cristián Reitze, director ejecutivo de la ANIM.
En cuanto a multas menos graves, la ley es clara: no señalizar debidamente antes de virar, conducir una motocicleta sin utilizar el casco protector y demás elementos de seguridad, los motociclistas se expondrían a una sanción.
Por último, desde la ANIM agregan que un motociclista podría verse afectado por una infracción leve, en caso de que el motociclista transporte carga que le impida mantener ambas manos en el manubrio, lo que podría afectar el control de la motocicleta, lo que también consideraría una multa.
“Queremos hacer un llamado a la comunidad en general sobre la importancia de conocer y respetar la reglamentación vial. Estar informados sobre las normas de tránsito no solo nos ayuda a evitar multas inesperadas, sino que también es fundamental para mejorar la convivencia y la seguridad vial de todos los actores en la vía pública. Al cumplir con las leyes, contribuimos a crear un entorno más seguro y armonioso para conductores, peatones y ciclistas. Juntos, podemos hacer de nuestras calles un lugar más seguro para todos” Afirma Cristián Reitze, director ejecutivo de la ANIM.